Era sábado 16 de Abril, Sábado Santo, cuando apareció un cadáver del sexo masculino en el famoso Parque Roosevelt.
El cuerpo estaba desnudo y ensangrentado, presentaba múltiples heridas de arma blanca, así como evidencias de abuso en su zona anal, glúteos y muslos.
Estaba claro que el hombre había sido violado y, a juzgar por la abundante sangre en la escena del crimen, también víctima de un ritual satánico. Lo habían tendido sobre un pentagrama en el que sus manos, pies y cabeza degollada coincidían con las cinco puntas. Sobre sus nalgas estaba dibujado el mismo pentagrama con su propia sangre.
La mañana de Sábado Santo, posterior a la noche del Viernes Santo, era famosa por ser fecha de ritos oscuros.
Horas después se identifico al cuerpo como el de Fernando Fabián Veloz, de 52 años de edad. Investigando su pasado se estableció que era un homosexual famoso en las redes sociales, bajo el apodo de Fabianda Sensual o Fernando Veloz Sensual.
Decenas de fotos suyas habían sido diseminadas en varios sitios de internet, en algunas se mostraba desnudo y en otras travestido, además aparecía en anuncios eróticos , en los que se identificaba como homosexual pasivo y masoquista.
Cuando se registró su hogar, su teléfono y notas personales, se detectó que tenía contacto con decenas de hombres activos. Algunos de los mensajes dejaban ver un perfil sádico.
Con el correr de los días y tras interrogar a decenas de hombres, se fueron descartando sospechosos hasta dar con los culpables: eran cinco hombres perteneciente a una secta, que habían contactado a la víctima para un encuentro en el Parque Roosevelt, la noche de Viernes Santo.
Ahí, los clientes lo sometieron y después lo colocaron boca abajo sobre el pentagrama.
Aunque los criminales fueron arrestados, a los pocos meses escaparon y no se los volvió a encontrar. Algunas personas creen que ellos se quedaron impunes por el poder que les concedió el demonio, gracias al sacrificio de Fernando Veloz Sensual.
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