Cuento enviado por Jose Rafael Cordero Sánchez (fan del blog y autor líder invitado)
Los sueños por lo general son comunicaciones, emociones irreales que todos experimentamos cuando dormimos, pero nunca debemos ignorar esas señales que vivamos o sintamos en sueños o pesadillas de tipo demoniacas que tratan de usar ese medio para comunicarse, hacer daño y poseer permanentemente un cuerpo.
Desde siempre me ha gustado lo paranormal, el terror u horror e igual que mi hermana, yo creo que lo llevamos en la sangre….Tengo casi medio infierno en mi habitación por mi colección de películas de terror, pero OJO!! No piensen que me gusta invocar espíritus o demonios, eso sí que nunca lo haría, solo sé que existen y los respeto pero hasta allí y no me meto con esas cosas. Solo sé que creo en Dios infinitamente, OK.
Mi apellido Cordero que proviene de parte de la familia de mi padre, que tiene un historial maldito que viene de generación en generación por causa de un tío de mi papá que era brujo, pero cuando digo brujo no un simple brujo charlatán, Noooo!! Era el propio demonio de carne y hueso. En ese tiempo mi papá solo era un niño y vivía en el campo, el nombre de ese señor (tío) es mejor no nombrarlo.
Ese ser quien pues desgraciadamente también era mi tío, practicaba la magia negra, tenía libros de conjuros y hechicería, donde mi padre fue testigo del poder y las habilidades que tenía. Podía agarrar una moneda y duplicarla, podía quitar verrugas y cadillos de la piel y algunas enfermedades, podía convertirse en invisible para que nadie notará su presencia y oír todas las conversaciones, les hacía brujería a la gente para dominarlas y humillarlas, se convertía en el animal que quería y también y que volaba.
Al morir este señor (tío), la familia se peleaba por poseer sus famosos libros, al final de todo le quedaron a los hijos. En la actualidad estos libros según mi papá aún existen.
Ya mi papá hecho un hombre por lo que se muda a la ciudad donde pues luego se casa y forma una familia y tiene 2 hijos, mi hermana y yo.
Mi hermana a la edad de más o menos de 10 años, se le fueron manifestando cosas paranormales, fue sintiendo presencias, veía cosas, tenía pesadillas muy feas, no era una niña común, ella cuenta que cuando todos dormían se paraba de la cama y caminaba por la casa a oscuras se asomaba por la ventana de la casa para mirar hacia la calle o a jugar con el perro de la casa, luego se cansaba y se iba a dormir. Como era una niña nadie le creía lo que sentía.
Y así fue transcurriendo el tiempo viviendo y sintiendo esas cosas malignas. Ya en la actualidad, casada con hijos hecha toda una mujer de 31 años, las cosas se fueron volviendo más intensas en casa de mis padres y también en casa de mi hermana.
Cuando estaba soltera y aún vivía en casa, no importaba si era de día o noche igual la perturbaban a la hora que fuese. Ella cuenta que cuando se dormía no importaba la posición que se encontrara, boca abajo o boca arriba, sentía escalofríos que llegaban por los pies y subían por las piernas, su cuarto se ponía como una nevera, sentía una presión que la hundían contra la cama era desesperante, sentía que le iban a quebrar los huesos, la asfixiaban mintiéndole la sabana por la boca, trataba de decir una oración y se le olvidaba, tenía una biblia cerca y sentía que se la apartaban, oía como se caían las cosas de su cuarto, esos espíritus malos le decían en el oído que se matara, que los dejara entrar en su cuerpo. Ya casada y con hijos, en su casa también les llegan diciéndole que mate a sus hijos, entre otras horrorosidades, ella jura que no era una pesadilla era muy real, se mordía la lengua para poder despertarse ya que no se podía mover.
Después empezaron a llegarme a mí por la noche cuando dormía, sentía esos terribles escalofríos por mi cuerpo al sentir la presencia que se acercaba y la gran presión que podía sentir como si estuviera algo encima de mi aplastándome, me susurraba al oído una espantosa voz demoniaca, pero era diferente al de mi hermana ya que no comprendía lo que decía era como en otra lengua.
Y no solo le ha sucedido a mi hermana y a mí, sino que en anteriores ocasiones también les llegaban a mis padres y hermanos de mi papa. Fue donde se dieron cuenta que no eran mentiras de mi hermana. En mi casa se oyen y se siguen sintiendo muchas cosas, mi hermana aun las siente mientras que yo tengo tiempo que no paso susto y hemos dejado de ver esas películas.
En fin no sé si es una maldición de los Corderos pero lo importante es que hay que orar mucho para que Dios nos libre y aleje de toda cosa mala que exista en nuestro hogar.
Atentamente
José Rafael Cordero Sánchez, ahora tengo 24 años soy un activista venezolano que defiende los derechos de los animales.
Un gran saludo.
Buena historia
Esta muy bueno pero ojalá y escriban más porque son muy buenos
Gracias por sus comentario, espero que se hayan asustado un poco, esta es una historia verdadera e igual la historia de Deglis, DON O MALDICION, Saludos.
Pero que miedo.. yo me aria los pantalones.
yo también tengo familia q son brujos, pero no son como los tuyos. huyyy!!
pero de verdad me gusto tu historia, da miedito.
Me parece que la historia esta muy bien relatada.,,donde nos cuenta acerca de los hechos que sucedieron k me parecen muy reales.,,
es una gra historia pero porfabor no manden ala muñeca ami casa!!!!!!!