Aquí te esperaremos (1ra parte)

Cuento enviado por aly pau (fan del blog)

Gina y Rosa eran mejores amigas una de la otra. Eran inseparables, hacían todo juntas, y prometieron no separarse nunca. Rosa tenía un novio, con el que ella era muy celosa. Él, al darse cuenta de que ella era muy celosa, él empezó a salir en secreto con otra chica, y ella se puso tan celosa que intentó matarlo.
Rosa le contó todo a Gina y ésta le ofreció refugio en su casa. Rosa pasaba días enteros afilando cuchillos, navajas y otros objetos punzantes.

Rosa llegó a casa de su novio, de nuevo intentó matarlo pero no lo logró, la chica con la que salía el novio de Rosa se enfureció, pelearon, y Rosa mató a la chica.
Llegó a casa de Gina con los brazos bañados en sangre. Limpiaron los cuchillos y Rosa se duchó. Gina cubrió a Rosa diciendo que el novio de ella (Rosa) mató a la chica. La policía lo arrestó y Rosa estaba realmente aliviada.

Un día, el novio (ahora ex-novio) de Rosa se fugó de la prisión. Ofreció «perdón» a Rosa, y cuando Gina salió a atender la puerta, se escuchó un grito de dolor. Gina llamó a una ambulancia pero no había otra causa: Rosa estaba muerta. Su ex-novio se llevó el cadáver y lo enterró en el patio de Gina. Gina lloró a su amiga y le guardó luto, cuando ella no pudo más, se refugió en el alcohol, más tarde se encontraba ingiriendo drogas, tuvo que ir al psiquiatra, y cuando nadie sospechaba, se suicidó ahorcada, sobre donde enterraron a Rosa.

Cuando los padres de Gina se mudaron de casa, llegó una familia que tenía un hijo que era infiel con su novia. Cuando, una noche, estaba recostado en su habitación, miró por la ventana dos sombras con forma de mujer.
Una fuerza lo reincorporó en su cama y susurraron a su oído:

«No salgas con nadie que no sea tu novia»

Una sombra lo mató con un cuchillo, y cada vez que algún chico infiel se encontraban, los espíritus de Gina y Rosa lo mataban, y nadie se podía librar de ellas.

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