Descripción: Román es un adolescente gay que vive con un padre intolerante, lo cual le llevará a tomar una horrible decisión.
Personajes: Román, Martín, Papá, Mamá
PRIMER ACTO
Frente a una escenografía urbana, Román y Martín entran riendo y dándose empujones como dos buenos amigos.
Martín: ¡De veras que eres un tonto!
Román: Sabes que es verdad lo que digo.
Martín: Lo sé… (se acerca a él y le sonríe), por eso me gustas.
Román (nervioso): Martín… aquí no, que estamos en plena calle…
Martín: ¿Y qué? No estamos haciendo nada malo. (Lo toma de la mano).
Román: Ya sé, pero… pero es que…
Martín: ¿Qué?
Román: Nada. Es que me pones nervioso.
Martín: No tienes porque estarlo. (Lo besa en la mejilla). Sabes que me gustas mucho, Román.
Ambos se miran entonces y tímidamente, unen sus labios.
Román (separándose): Martín, perdona… me tengo que ir a casa. Ya es muy tarde.
Sale corriendo de escena.
SEGUNDO ACTO
Román entra en su casa y encuentra a sus padres en la sala de estar.
Papá (molesto): ¿Dónde estabas?
Román: Andaba por ah´´i con los muchachos.
Papá: ¡¿Tú te crees que soy tonto?! ¡Andabas haciéndote tonto con el rarito ese!
Mamá (nerviosa): Cariño, por favor…
Papá: ¡No quiero escuchar nada!
Se acerca hasta Román y le propina un golpe que lo tira al suelo.
Papá: ¡En esta casa yo quiero hombres! ¿Tú te crees que no sé lo que haces por ahí con ese depravado?
Román solloza en el suelo.
Román: ¡Pero no hacemos nada malo, papá! ¡No le hacemos daño a nadie!
Su padre vuelve a golpearlo y acto seguido, le da una patada que le quita el aliento.
Mamá: ¡Basta! ¡Basta, por el amor de Dios! ¡Es tu hijo!
Papá: ¡Es un anormal del que me avergüenzo! Lo que hace es una aberración… y si no piensa cambiar su comportamiento, yo no puedo consentir que siga viviendo bajo mi techo. Ojalá nunca hubieras nacido.
Román se arrastra por el suelo sollozando.
Román: ¡Sí! ¡Ojalá nunca hubiera nacido para no tener que soportar a un padre como tú! ¡Estoy harto de vivir!
Se levanta como puede y sale corriendo de escena.
TERCER ACTO
Román se encuentra en el baño, vestido tan solo con su ropa interior. Su cuerpo se halla cubierto con cicatrices y moretones. Cierra la puerta con seguro y se mira al espejo con tristeza.
Román: Te odio.
Abre un cajón del lavabo y toma una cuchilla para afeitar, mirándola con resentimiento.
Román: Si no puedo cambiar lo que soy y lo que siento, ¿entonces que caso tiene que siga aquí? Si está mal ser así, querer a alguien como yo… ¿entonces como se supone que sea feliz? Ya no aguanto más.
Se acerca hasta la bañera y la llena de agua.
Román: Adiós, papá. Ya no podrás hacerme daño.
Se mete en la bañera lentamente y una vez allí, dirige la cuchilla hacia sus venas, gimiendo de dolor. Acto seguido se desvanece y queda inmóvil mientras el agua se tiñe de rojo. Alguien toca a la puerta desde afuera.
Mamá (voz fuera de escena): ¿Román? ¿Román estás bien?
No hay respuesta.
Mamá (con voz angustiada): ¿Román?
FIN
horrible, no me gustó para nada. pésima