Esta es una historia en la que un par de jóvenes pretenden burlarse de un señor con capacidades mínimas de viveza ante la vida y ante las frases hechas, haciéndole creer que su burro ha sido convertido en hombre nuevamente y que su padre lo maldijo por vago y por no querer estudiar. Es al final de la historia donde no se conoce cuál de los dos es más asno, si el animal o el mismo dueño de él.
Personajes
Jesus
Marcos
Peregrino
Cándido
Burro
Entre risas, entran al parque dos jóvenes Jesús y Marcos, planeando una mala jugarreta.
Marcos: Es una idea genial
Jesús: Si, pero él no es tan tonto como para creerse ese cuento.
Marcos: También, pero ¿por qué crees que lo hacen llamar cándido, cuando su nombre real es Víctor? Es tan ingenuo que todo se lo cree.
Después de unos minutos, se encuentran con Cándido
Cándido (hablándole a su burro): Esta tarde es genial para dar un paseo contigo, burro. Está realmente entretenido este paisaje.
Jesús: ¡Pobre de mi!
Cándido: Oh Dios Mío, ¿dónde está mi asno?
Jesús: Soy yo tío, tu asno, me he convertido nuevamente en hombre
Cándido: ¿Cómo es eso? eso es imposible
Jesús: Yo se lo explicaré en unas cuantas palabras. Siempre he sido mal estudiante y muy vago, fue asó como un día mi padre cansado de mi vagancia me dijo: -Eres un burro, deberías haberte convertido en eso. Una vez que pronunció esas palabras, al darse la vuelta ya usted me ha visto tío, era un asno.
Cándido: No había escuchado nada parecido anteriormente. ¿qué cara van a poner todos en el pueblo cuando te vean?
Jesús: disculpe la molestia, tío Cándido, pero por favor devuélvame mi libertad, quisiera estar otra vez con mi familia.
Cándido: Te entiendo muy bien, pero me harás mucha falta. Siempre te has portado como un buen asno. Te devuelvo tu libertad, ve a tu familia.
Jesús: Si, como usted conmigo Tío Cándido. Gracias, cualquier asno viviría feliz junto a usted.
Cándido (se consigue a un viejo amigo con un burro en su costado): Peregrino, no me vas a creer pero mi asno era un estudiante bastante vago.
Peregrino: Señor, le vendo este burro que es una maravilla. Será el mejor asno de todos.
Cándido (reconociendo a su burro): ¡Oh no! Otra vez eres tu.
Peregrino: Ah, perdón… – Señor, le vendo este burro que es una maravilla. Será el mejor asno de todos.
Cándido: El mal estudiante lo ha hecho de nuevo, ha vuelto a ser un vago y su padre lo ha maldecido de nuevo. Eres muy burro para estudiar
Peregrino: ¿qué dice, señor?
Cándido se acerca hasta el asno
Cándido: quien no te conozca, que te compre.
La sociedad está tan loca que ahora nada se entiende. Este señor busca un burro que estudie. Imagínate cómo anda el país. Vamos a ver si conseguimos un comprador que sea menos asno, porque este que te ha tocado creo que va igual que tú.
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