Descripción: Obra de teatro para niños. Un león muy sediento llega a un lago maravilloso, pero allí, hay algo que lo tiene aterrado.
Personajes: León, Jirafa, Elefante, Pantera
PRIMER ACTO
Un león aparece en escena, arrastrándose en el piso, muy cansado y sediento. Detrás de él, la escenografía muestra una selva frondosa y en el centro del escenario, un enorme lago se encuentra representado por un contenedor con agua, rodeado de piedras de utilería.
León (sorprendido): ¿Será posible? ¡Agua! ¡Oh, gracias al cielo! ¡Después de tantos días vagando sin encontrar nada que beber!
Se acerca a toda prisa a beber pero cuando ve su propio reflejo, se detiene, asustado.
León: ¡Ay, Dios mío! ¡Qué león tan fiero!
Sale corriendo de escena. Por el otro lado del escenario entran un elefante y una jirafa entran, y miran extrañados el sitio por donde desapareció el león.
Elefante: ¿Qué le habrá picado a ese?
Jirafa: Parece que vio algo extraño en el agua. Me parece que se asustó.
Elefante: ¡Un león asustado! La de cosas que uno se encuentra en este mundo. (Mira hacia el lago con suspicacia). Yo no veo que haya nada raro.
El elefante y la jirafa beben tranquilamente.
SEGUNDO ACTO
El león entra corriendo a toda prisa en el escenario, que ahora es pura selva. Se detiene en el centro y se deja caer en el suelo, exhausto. Todavía tiene mucha sed.
Una pantera entra en ese instante, tarareando una canción.
Pantera: Eh, compañero felino, ¿por qué esa cara tan larga? ¿Qué pasa? Parece que hubieras corrido una maratón.
León: Más o menos… tenía que escapar del otro león, se veía realmente amenazante.
Pantera: ¿León? ¿Cuál otro león? Por aquí no hay leones… o no había, hasta que llegaste tú.
León: Pues el león que vive en el lago, ¿no lo conoces?
Pantera: Te repito amigo mío, que allí no hay ningún león.
León: Yo lo vi, estaba en el agua, mirándome. ¡Era realmente grande! Ay, (se lamenta), y lo peor es que no pude tomar ni un poquito de agua y tengo mucha sed.
Pantera: Hubieras bebida del lago, todavía puedes volver.
León: ¿Estás loca? ¡Yo no vuelvo a ahí por nada del mundo! Ese león me puede morder.
Pantera: Bueno, a final de cuentas tú también eres un león, ¿no puedes defenderte?
El león agacha la cabeza avergonzado.
León: No me gusta la violencia, soy un león pacífico. Por eso me fui de mi manada.
Pantera: Bueno, pues de todas maneras te voy a demostrar que no hay nada que temer. Acompáñame.
TERCER ACTO
La pantera y el león entran en escena, él se ve muy nervioso.
Elefante: Ahí llega de nuevo.
Jirafa: Y trae un amigo.
Pantera: Mira en el agua.
León: ¡No! ¡Tengo miedo!
Pantera: Anda, asómate.
El león se asoma, cauteloso.
León: ¡Ay! ¡Allí está, te lo dije!
Pantera: Pero vamos, que solo es tu reflejo.
León (sorprendido): ¿Cómo?
Pantera: Ese eres tú, ¿nunca te habías visto reflejado en el agua?
León: Por Dios, si tienes razón. ¡Qué alivio!
El león se pone a beber contento. Los otros animales ríen.
Pantera: Bueno, los miedos suelen ser así, sumamente intimidantes. Sin embargo, solo están en nuestra imaginación.
FIN
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