Juan vivía en un pequeño pueblo alejado de la ciudad, su Padre siempre veía con preocupación que su hijo quisiera sentir miedo, de hecho no había cosa animal o suceso que lo pusiera a temblar, las tormentas, truenos, cuentos de terror o la oscuridad no eran nada para él.
En vista de sus intentos infructuosos Juan decide marcharse en búsqueda de Aventuras para sentir lo que era el miedo de una vez por todas, su familia se opuso pero el chico era muy testarudo, así que partió sin la aprobación de sus padres.
Recorrió el reino visitando los lugares más tenebrosos que ningún hombre se atrevería a entrar, casas embrujadas, pantanos, cementerios, bosques sombríos, puentes, pero en todos los lugares a los que acudía nunca sentía miedo.
Durante su visita a la ciudad se encontró con un cartel muy curioso.
“Quien logre pasar 3 noches en mi castillo encantado, tendrá el honor de desposar a mi hija Esmeralda”
Parecía sencillo se convertiría en Rey una vez desposara a la hermosa Esmeralda, los rumores cuentan que el castillo se encontraba bajo un maleficio y todo tipo de criaturas lo visitaban durante las noches.
Juan se presentó ante el Rey; afirmando no tener miedo en absoluto, aceptaba el reto para desposar a la princesa, muy gustoso el rey le dio la bienvenida alabando la valentía del joven, curiosamente era el único que se presentó para este reto.
La primera noche un sueño agotador se apodero de juan, quien no dudo en recostarse en su cama, pasada unas horas algo lo despertó, no se inmuto ni se asombró pero un fantasma se encontraba en su habitación, rápidamente juan sin miedo tomo una tijera para cortar las sabanas que este cargaba, el fantasma huyo.
La mañana siguiente el rey visito a Juan quien para su sorpresa se encontraba a salvo y aun en el castillo, felicito al joven por lograr lo que muchos no pudieron, pasar una noche en el castillo, ahora solo faltaban dos noches más.
Juan se encontraba a la expectativa de toparse con algo que lo asustara verdaderamente, pronto un par de risas hicieron eco desde el pasillo, ¡Una Bruja!, entro al cuarto tumbando la puerta y sobrevoló por encima de Juan, pero esto no lo afecto, de un brinco tomo la escoba y la lanzo hacia la ventana sacando a la bruja del cuarto.
Durante la última noche de Juan en el castillo algo diferente paso, primero todo se encontraba en silencio, era sospechoso, hasta que un gran dragón apareció escupiendo fuego, la bestia parecía decidida a acaban con Juan pero este no se inmuto, tomo una silla y la arrojo al animal, como un perro adolorido huyo del valiente Juan quien lanzaba todo tipo de objeto.
El rey le entrego la mano de su hija en matrimonio a Juan quien había superado la prueba, El joven se encontraba lleno de alegría pero dentro de sí mismo se sentía frustrado al no poder sentir miedo.
Esmeralda conocía la preocupación de su amado esposo Juan, así que para ayudarlo decidió verter una jarra de agua helada, Juan despertó de un brinco, temblando y pálido, había conocido el miedo, agradecido con su esposa la abrazo fuertemente, pero también le pidió que no revelara el secreto, ya que si no la gente no le llamaría por su apodo; Juan sin miedo.
Su Amada esposa guardo el secreto.
¡Sé el primero en comentar!