Descripción: Obra teatral adaptada de un creepypasta. María acaba de mudarse a una casa nueva con su novio, cuando encuentra algo muy extraño en las paredes.
Personajes: María, David, Comandante, Policía 1, Policía 2
PRIMER ACTO
María y David, una pareja joven, entran en escena a lo que parece el salón de una casa antigua, con herramientas en mano.
David: Me da mucho gusto que por fin la casa sea nuestra, mi amor. Ya verás que bien va a quedar cuando la terminemos de renovar.
María: Es una joya y el precio fue genial. Pero tienes que admitir que ese papel tapiz es horrible, (mira hacia la pared con el ceño fruncido). Tiene que ser lo primero que quitemos de acá.
David: Vale, hay que comenzar por arrancarlo para ver como están los muros abajo.
Juntos comienzan a arrancar el papel entre risas.
María: Mira, ¿qué es eso? (Señala una esquina recién pelada).
David: Julio Cáceres, 20 de julio de 1994… ¿será el anterior dueño de la casa?
María: Qué raro.
David: En fin, mejor nos apuramos. A ver si terminamos de pelar todas las habitaciones el día de hoy.
SEGUNDO ACTO
En una habitación diferente, David entra y arranca otro buen pedazo de papel tapiz. Se fija en algo que está escrito cerca del suelo y frunce el ceño.
David: Qué raro, aquí también… Verónica Fuentes, 15 de diciembre de 2004… ¡María, ven!
María entra.
María: ¿Qué pasa, amor?
David: Aquí también hay un nombre y una fecha.
María: Sí, en el dormitorio en el que acabo de estar también. No sé David, pero algo aquí ya me empieza a oler muy mal.
David: Vamos a llamar a la policía. No toques nada más.
David saca su teléfono y marca un número.
TERCER ACTO
En otra habitación de la casa, la pareja espera a que la policía termine de inspeccionar. Son dos oficiales que están revisando el papel arrancado y el comisario, quien habla con ellos en medio de murmullos. De pronto, alcanzan a escuchar algo que dice uno de ellos.
Policía 1: Sí, es humano.
María (asustada): ¿Qué cosa? ¿Qué cosa es humano?
Comisario: ¿Acaban de comprar esta casa?
David: Sí, la semana pasada arreglamos el contrato con la inmobiliaria. ¿Pero qué sucede, comandante? ¿Pasa algo malo?
Comisario: Me temo que sí, ¿dónde está el papel tapiz que arrancaron hasta ahora?
María: Lo apilamos todo en un armario bajo las escaleras. Pensábamos tirarlo el martes, que es cuando viene la basura. ¿Por qué?
Comisario: Eso que acaban de quitar no era papel, señora.
David (pálido): No, no puede ser… ¿no estará usted insinuando…?
Comisario: Lo que ustedes arrancaron señores, era piel humana. Al parecer esta casa pertenecía a un asesino en serie al que le perdimos la pista en los últimos años.
María se lleva una mano a la frente como si estuviera a punto de desmayarse, David la sostiene.
Comisario: Todo coincide. Los nombres y fechas de las víctimas que desaparecieron hace tiempo. Este loco les mataba pero jamás pudimos encontrar los cuerpos. Al parecer ya sabemos lo que hacía con ellos: el maniático los desollaba para tratar sus pieles y poder forrar sus paredes.
David: Dios mío.
María: Creo… creo que después de todo no podremos vivir aquí.
FIN
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