Esta es la segunda parte de la historia escrita por Henryk Aguilar. Para leer la primera parte debes hacer CLIC AQUÍ.
(La escenografía cambia. De nuevo los árboles, la banca, el pasto y el farol. Aparece sentada Elizabeth en la banca, esperando a Julio, mira constantemente el reloj pero no llega, hasta que decide que es mejor irse pues Julio no llega. Cuando estaba a punto de irse, un grito a lo lejos se escucha)
Julio: (gritando) ¡Elizabeth! ¡Espera!
Elizabeth: (Voltea y sonríe. Contenta va y abraza a Julio)¡Julio! Creí que no ibas a venir. Por poco me iba muy triste.
Julio: (Algo cansado responde) Perdona, ¡es que me he demorado un poco con un trabajo de la universidad! pero vine lo más rápido para poder llegar contigo.
Elizabeth: (sonríe y bromea) Sabía que no me ibas a abandonar.
Julio: No, como crees, no te abandonaría.
(Se sientan en la banca y comienzan a platicar, las luces bajan como sí fuera ya más tarde, y empiezan a terminar su plática)
Elizabeth: (contenta) Bueno, ya es el segundo día y me sigue gustando más platicar contigo, ya no te cohíbes mucho, y ya sé más sobre ti.
Julio: (contento) A mí también me gusta mucho estar contigo, me la paso increíble, espero que mañana sea igual y mejor.
Elizabeth: (con un tono triste dice) Bueno, ya se hizo tarde de nuevo, disfruté platicar contigo y conocerte más, no me gusta tener que irme. Mañana te espero aquí, no llegues tarde, cuídate bastante, te extrañaré demasiado.
Julio: (contesta con tono triste) También te extrañaré mucho, pensaré y soñaré con lo que platicamos, cuídate, y nos vemos mañana puntualmente.
(Se despiden y de nuevo toman sus caminos, y se cierra el telón)
Narrador: y como el tiempo pasa muy rápido, Elizabeth y julio continuaron viendo se en el mismo parque, julio la invitaba a comer, a un helado, o a caminar, y así fue surgiendo un sentimiento especial en ellos dos.
(La escenografía, una pequeña tienda, unas mesas, y se alza el telón y Elizabeth y Julio comiendo una nieve, platicando, se le nota un poco nervioso)
Elizabeth: (pregunta interesada) ¿Julio, estás bien? Te noto extraño.
Julio: (contesta nervioso e inseguro) Sí, estoy, bien, pero hay algo que te quiero decir.
Elizabeth: (le pregunta con interés y nervios) ¿Qué me quieres decir? ¿Dime, qué es?
Julio: (contesta nervioso) Es que, yo, quiero, decirte algo.
Elizabeth: Pues dime, no te cohíbas, dime, ¡dime!
Julio: (nervioso, y pausado contesta) Elizabeth, ya van varios meses que te conozco, me gusta demasiado estar contigo, me la paso de lo mejor estando contigo y yo, en mí siento algo, un sentimiento muy grande por ti, que cada día se hace más y más grande, y, bueno, pues te quería preguntar… que si tú… si tú…
Elizabeth: (con duda y nervios pregunta) ¿Si yo? ¡Dime!
Julio: (contesta nervioso) Si tú… ¿quieres ser mi novia?
Elizabeth: (sorprendida y contenta, abraza a Julio y le responde) ¡Sí! Claro que sí Julio, ¡sí quiero! También te quiero de una manera especial.
(Elizabeth y julio se abrazan y se cierra el telón)
(La escenografía, vuelve al parque, se abre el telón y en la banca están los novios Elizabeth y Julio, comiendo un helado, los dos platican, y sonríen, los dos celebran que llevan ya un mes de novios)
Elizabeth: (contenta y sonriente) ¡Julio! Este primer mes es de lo mejor, me gusta pasarla contigo. Siempre lo supe, eres diferente, te quiero tanto, mucho, ¡muchísimo!
Julio: (alegre, sonriente y feliz) A ti es quien te debo mi felicidad, me haces muy feliz, y te quiero mucho, bastante, ¡muchísimo Elizabeth!
(Los dos se abrazan y siguen platicando. De pronto se nota que Elizabeth se queja por un instante de un dolor en el pecho pero a los segundos se le quita y siguen tranquilos platicando y se cierra el telón)
Narrador: nuevamente el tiempo pasó y Elizabeth y Julio celebran muy felices de cumplir su primer año de novios, un año lleno de alegrías, pláticas, caminatas, risas, bromas.
La escenografía: el cuarto de Elizabeth. Es de noche, se sube el telón. Elizabeth acostada, se empieza a quejar de un dolor de corazón, un dolor fuerte y constante, le dura alrededor de 10 minutos pero se le calma e intenta volver a dormir.
Se baja el telón, y la escenografía es ahora del parque, de nuevo en el mismo lugar Elizabeth y Julio se encuentran platicando, pero esta vez Elizabeth se nota un poco decaída y con muy pocos ánimos. Julio la abraza fuerte, y le da un beso, mientras la abraza. Elizabeth se queja del dolor en el corazón, pero para no preocupar a Julio le dice que se había golpeado pero que no le duele mucho, y julio la abraza y se cierra el telón)
Ahora la escenografía es el exterior de la casa de Elizabeth. Afuera los reciben los papás de Elizabeth pues para entonces ya llevan 2 años de novios y los papás de Elizabeth ya saben del noviazgo de ellos. Julio les comenta que ha visto muy decaída a Elizabeth y que se quejó de un dolor.
Julio: (preocupado y algo triste se despide de Elizabeth) Elizabeth, me voy, te dejo con tus papás, te quiero mucho, no quiero que te pase nada, estoy preocupado por ti (abraza a Elizabeth y se despide de los papás. Se baja el telón)
La escenografía ahora es el cuarto de Elizabeth de noche, sube el telón y aparece recostada en la cama Elizabeth, y se queja aún más fuerte del dolor que tiene en el corazón, ya el dolor se ha convertido en algo muy seguido, pero Elizabeth no quiere preocupar a nadie. Sabe que es fuerte y que puede ser sólo un dolor. Se baja el telón.
La escenografía: El parque. Se alza el telón y aparece Julio esperando a Elizabeth.
Julio: (pensativo) ¿dónde estás Elizabeth? (Se queda sólo por una media hora y se encuentra a Fabiola, la mejor amiga de Elizabeth.)
Fabiola: ¿Julio? julio! Hola!
Julio: Hola Fabiola, hace tiempo que no te veía, ¿cómo te ha ido?
Fabiola: Bien, gracias, oye pero eso no es lo importante.
Julio: (pensativo y nervioso pregunta) ¿A qué te refieres? ¿Qué sucede?
Fabiola: (triste) Se trata de Elizabeth.
Julio: (impaciente pregunta) ¿Elizabeth? ¿Qué tiene? ¡dime qué tiene! ¿Le paso algo? ¡dime qué tiene!
Fabiola: (tratando de tranquilizar a Julio) Calma, siéntante. Elizabeth está mejor. Anoche tuvo un dolor muy pero muy fuerte y la llevaron al hospital pero ya está bien y está en su casa.
Julio: (impaciente) ¿puedo ir a verla? Dime, ¿está bien?
Fabiola: Sí, sí, está bien, sólo fue el dolor pero está bien. Le recomendaron reposar mucho tiempo y por mientras la llevarán a una hacienda para que respire aire fresco de la naturaleza.
Julio: (triste) ¿se la llevarán? ¿A dónde? ¿Cuánto tiempo? Tengo qué verla.
Fabiola: (calmando a julio) Espera, no puedes ir, si quieres yo le doy un mensaje de tu parte a Elizabeth.
Julio: Pero si en 3 días vamos a cumplir 3 años. El tiempo con ella es hermoso, no puedo dejar de estar con ella, ella es única e inigualable, tengo que verla, dile por favor, que la quiero ver, aún así me tenga que saltar la barda para llegar con ella lo haré, pero tengo que verla.
Fabiola: le diré, pero no hagas nada aún.
(Se cierra el telón)
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ME ENCANTARON LOS PERSONAJES
que hermoso nunca habia leido estas odras me encantaron
Amo esta obra y la voy a utilizar para una obra de teatro en la escuela yo seré eli y otro niño sera Julio q lindo no?? Gracias por escribirla
Me gusto mucho y es romantico