Había salido de la escuela, estaba ansiosa porque Aiden encontrara la nota que le dejé, mientras caminaba hacia mi casa recordaba como lastimé a Delia, me encantó que todos se rieran conmigo, seguro ella me odiaría ahora pero, ¿quién me culparía?
No estaba pasando por buenos momentos, ni estaba de humor como para que estuvieran parloteado detrás de mi asiento. Llegué a mi casa y escuché una orden en mi cabeza, era más como un recuerdo.
-Kate,debes ir a visir a tu hermano.
Mi hermano me ayudaría a estudiar para el examen final, ya que no me estaba yendo bien en la escuela. Mi madre había muerto hace 11 meses por lo que no estaba muy centrada…
Escuché un ruido en la cocina, era como si se hubiera caído alguna cacerola; sin embargo decidí ignorarlo y seguir esa orden inesperada. Dejé mis cosas de la escuela y me fui a dar una ducha, cuando salí escuche un susurro:
—Wendy.
Creí que eran los vecinos, ellos eran demasiado raros, les decía las cucarachas inmortales, siempre se libraban de todo.
A eso de las 17:30 llegué a casa de Nathan, estuvimos hablando y estudiando, pero por alguna rara razón, ese nombre continuaba repitiéndose en mi cabeza: Wendy.
Por la noche, al volver a casa, opté por tomar un atajo en una calle muy rara, totalmente vacía. Estaba llena de casas abandonadas y destrozadas aunque por alguna razón me sentía… tranquila. Normalmente cuando estoy en lugares así me lleno de paranoia, pero me sentía serena. De pronto escuché un susurro, no logré captar lo que decía, pensé que se trataba de algún drogadicto. Me puse un poco nerviosa al captar un movimiento extraño en una de las casas, por uno de los ventanales vicomo una persona corría.
Seguí caminando pero me sentía observada, escuche otro susurro:
—Wendy está aquí.
Me asusté mucho, escuché una risa burlona tras de mí, me detuve, me di vuelta y lo vi. Era este tipo, lo veo y no lo puedo parar de ver. Samuel, Samuel y SAMUEL, todas pero todas las malditas noches me recuerda que nunca tuve que meterme en esa calle, pero de lo que más me arrepiento es de haber abusado de mis compañeros. Samuel hizo que todo regresara en un instante, soy la burla de todos a quienes maltraté, él me vigila. Sé que le lleva información a ella, sé que hay más como él, sé que hay más almas que son manipulados por ella.
Quieren que les ceda de mi alma, pero es eso o que me maten- Él me prometió que estar con ella era mejor que estar viva, pero lo odio, odio a ese espectro, odio a esa cosa, odio a ese ente desgraciado. Samuel viste un uniforme negro y blanco, tiene el cabello despeinado y de color castaño claro, utiliza un sombrero de copa, tiene la cara llena de líneas negras, la piel blanca, y de su cara se extiende siempre una sonrisa. En sus ojos refleja la muerte y la venganza.
ESE CUYA ALMA LE PERTENECE A WENDY, Y QUE HARÁ TODO LO QUE ELLA LE ORDENE.
Pd:Esta historia la encontré en el diario de una amiga recién fallecida, ¿les digo como murió? Wendy me dijo que lo hiciera.

¡Sé el primero en comentar!