Juanito:
– ¡Vamos!, ¡todos preparados! – se dirige a su ejército de plástico – Hemos esperado mucho este momento y ha llegado por fin. Kobey, – se dirige a su juguete favorito, un perro humanoide con armadura y gallarda postura. – confío en ti. Sé que nos llevarás a la victoria.
Narrador:
Juanito se sobresalta al creer ver como Kobey realiza una sutil reverencia, dando a entender que se hace cargo y que luchará hasta el final.
Juanito:
– ¿Será posible?. Kobey, ¿tú me has saludado?. – pero no obtiene respuesta alguna.
Narrador:
Mientras se desarrolla el juego y la batalla con los juguetes, Kobey se da un golpe contra el suelo y se le rompe la mano de la espada. Juanito lo recoge en seguida y, sin poder contenerse, empieza a llorar por su juguete roto.
Juanito:
– Kobey, ¡no!, ¡no!, no… snif – solloza mientras intenta recomponer el desastre.
Kobey:
– No es nada, Juanito, ya verás como con un poco de pegamento se me pasa en seguida – le dice de repente el juguete, mientras guiña un ojo al joven.
Juanito:
– Pero… ¿de verdad me estas hablando? – el niño está estupefacto, pestañea y se señala a si mismo con el dedo.
Kobey:
– Sí, solo quiero que estés tranquilo. Al fin y al cabo soy un juguete y me pueden arreglar en seguida.
Juanito:
– Entonces, ¿antes estabas haciendo una reverencia?
Kobey:
– Así es, me ha salido casi sin querer. Normalmente es algo que los juguetes no queremos mostrar, las normas son claras con respecto a comunicarse con humanos. – Juanito asiente como si comprendiese. – Pero, al verte tan desconsolado he querido que te quedes tranquilo.
Juanito:
– Bueno, tampoco estaba tan desconsolado – dice mientras mira para otro lado algo avergonzado por su actitud ante su valiente juguete.- Pero, ¿quién es el que no te deja hablar con humanos?
Kobey:
– No puedo decírtelo Juanito, lo siento. – Kobey parece recapacitar – De hecho, no podré volver a hablar contigo más, pero espero que nunca olvides este momento, y al hacerte mayor pienses que solo ha sido un sueño.
Juanito:
– Te lo prometo Kob…
Narrador:
Sin avisar, la madre de Juanito entra en la habitación. Juanito se da la vuelta sin acabar su frase y mira a su madre con los ojos muy abiertos del susto.
Madre:
– ¿Qué te pasa Juanito?, me ha parecido oírte llorar.
Juanito:
– Nada , Mamá… es solo que…- Juanito se da la vuelta para mirar a su juguete, pero de él ya solo queda el brazo maltrecho que había perdido.
Madre:
– ¿Qué? – su madre empieza a impacientarse.
Juanito:
– Creo que he perdido a Kobey, no sé dónde puede estar.
Madre:
– Cariño si no lo encuentras te compraremos otro – la madre dulcifica su actitud.
Narrador:
Pero Juanito ya estaba perdido en sus pensamientos y no escuchaba a su madre. Adiós Juanito.
esta chebre la obra
o puense que era de terror esta hirtoria
(=
Esta bien padre
hola amigos como estan esto es para ustedes
Me encanto la obra.
ESTA SUPER LA OBRA
esta inverible la obra
YoloooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooOooooooooooOOOooOooOoOoOOoOoOOoOooOoOOOOoOooOoOoopOOOOooooOooooOoOoOOoOoOooO encuentra el error
oc :v
la p
solo me gusto la de el televisor
si esa estuvo buena
Hola (hijo).
me encantó!!
El final me confundió un poco, tal vez pudiese ser mejor, pero buena historia.