La granja es un pequeño pueblito donde habitan muchos animales tanto domésticos como salvajes, su alcalde el Señor Gallo gobernaba con justicia y cordura, vivían tiempos de abundancia y tranquilidad, todos adoraban la gestión del señor gallo excepto uno.
El señor Sapo detestaba al alcalde, podía pasar días enteros tratando de convencer a la gente que el alcalde seria la ruina de todos, que solo quería mantenerse en el poder para disfrutar de los lujos que el puesto le daba.
Pronto habría elecciones y varios candidatos se postularon al puesto, El señor cerdo, El señor Rata, La señora Gansa, El señor toro y por supuesto el señor gallo, Sapo no podía dejar pasar esta oportunidad así que se postuló para el cargo.
Muchas eran las propuestas de los candidatos pero sin duda la propuesta del señor sapo sorprendía a todos.
“Ya es hora de que los animales de la granja tengan lo que por derecho les corresponde, el señor gallo les ha mentido todos estos años, voten por mí y tendrán una casa decente y una carreta, voten por mí y nunca pasaran hambre, voten por mí y nunca as pagaran impuestos”
A medida que las encuestas arrojaban a señor gallo como posible ganador, el señor sapo se angustiaba cada vez más, él quería ser el nuevo alcalde a como dé lugar.
“El señor gallo ha mentido, se le vio cerca del bosque negro negociando con lobos, ¡temblad! Quiere entregar los polluelos, regalar la leche de nuestras vacas, vender nuestro trigo y entregar a los cerditos, ¿ese es el alcalde que quieren para ustedes?”
Las multitudes aclamaban a señor sapo, el señor gallo a pesar de su inocencia no podía dejar de sentir vergüenza.
El día de las elecciones llego, cientos de animales asistieron al evento, cuando las urnas fueron cerradas el resultado fue, 70% Señor sapo, 15% Señor gallo, 10% Señor toro, 3% Señor rata y 2% Señora gansa.
Una gran fiesta se celebró en la granja tras la victoria del nuevo alcalde, su primera orden fue desterrar al señor gallo del pueblo, ya que no podía vivir en el mismo sitio que el de un traidor, señor gallo muy triste abandono el pueblo con toda su familia.
Como nuevo alcalde el señor sapo comenzó a tener algunos problemas, luego de repartir todas las reservas de alimentos, no haber recaudado los impuestos trajo escasez y hambruna, los habitantes de la granja se encontraban molestos porque no habían tenido lo que se les prometió.
Ya no podía Salir a la calle porque los aldeanos lo seguían a todas partes para solicitar lo que les correspondía.
“Señores, señores, les daré todo lo que piden pero se me hace difícil con tantos problemas que dejo el señor gallo, les prometió que más temprano que tarde sus peticiones serán cumplidas”
Ya luego de dos meses de gestión, el señor sapo creía que podía contar con el apoyo de la gente, a sus oídos llego el rumor de que el señor gallo había fundado una aldea a las orillas del bosque negro, siendo prospera en tan poco tiempo, el alcalde pensó que sería su oportunidad.
“Mis leales súbditos, hemos descubierto donde están nuestras riquezas, en las orillas del bosque, a manos del traidor, el señor gallo quien aprovechándose del botín que robo de nuestros hogares ha fundado una aldea de ladrones, propongo que nos armemos y ataquemos al traidor y recuperemos lo que es nuestro”
Los animales no pudieron creer lo que su alcalde les decía, decidieron ir a la aldea pero ignorando la oren del señor sapo, estos no irían a la guerra, por el contrario pedirían ser ciudadanos de la nueva aldea.
El señor sapo se quedó para gobernar un pueblo vacío.
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