Érase una vez, un rey que tenía una hija de lo más hermosa dentro de su pueblo. Él ordenó que le presentaran 3 pretendientes y el más apuesto sería el que pediría su mano, pero vio que los tres estaban bien para ella, entonces dejaría que ella decidiera. La niña entonces al verlos, contestó que quería a los 3 -Pero hija, dijo el rey, eso no puede ser -Si puede ser y yo ahora estoy eligiendo a los 3, padre. -piensa con la cabeza mujer, le dijo el...
Autor -Grecia Morillo
Amante de la buena lectura y escritura, siempre tratando de generar el mejor contenido para el disfrute de cada lector.
“Yo soy el mono titiritero, soy el más inteligente del mundo entero. Mis volteretas son un vaivén y con el rabo cuento hasta cien». Esta era la canción que se escuchaba cada día en la orilla del mar, en el terreno de monolandia, donde practicaba cada uno de sus saltos, sus vueltas y también sus cabriolas. Sin embargo, durante una mañana se escucharon una serie de aplausos que acompañaron el fin de la canción del mono titiritero. ¿Y ahora bien...
En tiempos lejanos, existía un hombre tan pero tan pobre que solo vivía para poder alimentar a su único hijo, por sobre todas las cosas y todas las adversidades que existiesen. -Padre mío, se que estás muy necesitado y yo no soy más que una carga que no puedes soportar, lo mejor será marcharme a buscar por mis propio medios lo que comeré día a día. El padre aceptó y solo le dio la bendición y una profunda sonrisa para su marcha. Fue entonces...
Érase una vez, un niño que se la pasaba en todo momento con un mal carácter. Un buen día, el padre le regaló una bolsa que contenía dentro, una cantidad de clavos diciéndole: “Cada vez que pierdas el control y la calma, debes clavar uno de estos clavos detrás de la puerta”. Fue así como empezó este nuevo reto para el niño. El primer día, el niño tuvo que clavar 37 clavos detrás de la puerta. En el segundo día, iba disminuyendo la cantidad de...
Había una vez un rey, un rey que era muy vanidoso, tanto así que le gustaba el lujo desde todas sus perspectivas, desde sus trajes y accesorios, hasta los detalles de su propia casa. Era de los hombres que gastaba a manos llenas todo su tesoro. Este, era un rey que no le gustaba hacer nada más que gastar e ir de compras. Solo vivía por y para lucir cada uno de los trajes que compraba a diario. Este, se cambiaba de ropa durante cada momento con...
Había una vez una pequeña joven que quería con mucho deseo, tener un bebé, por lo que decidió ir con su pareja hasta donde el mago del pueblo a ver qué solución podía darles al respecto. El mago, después de ver su preocupación, empezó a buscar dentro de sus largas listas, las distintas pócimas, hechizos así como también artilugios para lograr el cometido en cuestión hasta que pudo conseguir la semilla de cebada, la elegida. El con sus estudios...
Había una vez, un hombre que poseía una gran fortuna tenía dentro de sus propiedades, elegantes casas, así como casas en la ciudad y en el campo, vajillas de cerámica, de oro y de playa. Las piedras preciosas no faltaban dentro de sus pertenencias y sus muebles forrados eran brocados de gran finura. Además, tenía elegantes caballos armados en carrozas para cuando quisiera dar sus paseos por el pueblo, sin embargo este hombre también contaba con...
Érase una vez, una mañana muy tranquila y Gregorio ha despertado en el cuerpo de un pequeño insecto. Después de haber estado echado de espaldas, sintió un caparazón de máxima dureza que se encontraba al azar hasta de la cabeza, teniendo a la vez, un vientre oscuro y convexo. Después de apreciar todo su cuerpo, también pudo ver callosidades curvadas las cuales no soportaban la colcha y por lo que quería tumbarse sobre el solo. Con muchas patas...
Un cliente habitual de una cantina, llegó un buen día pidiendo a sus íntimos amigos, dinero para llevar a su hijo al doctor, el cual se encontraba enfermo en casa. Sin embargo, ellos no hicieron caso a la desgracia de su amigo, sino que prefirieron seguirse divirtiendo sin tomarle nada de atención. Uno de los amigos replicó: Oye, no tenemos ni un peso, pero te daré lo único que me queda en secreto. También te cuento que por allí cuentan que...
Un aviador ha tenido un accidente en pleno campo del desierto y se encuentra con un niño, un niño que viene desde un planeta lejano y pequeño. El principito como lo llamaban, le pregunta al aviador si los corderos comían arbustos, su respuesta fue, sí. ¿Y los baobabs, también se lo comen los corderos? Dijo el principito. El aviador le hizo saber a éste que los baobabs no eran arbustos, sino al contrario eran árboles gigantes, tan altos como las...