Erase una vez una joven pareja que quería hacer su vida sola, realmente fue una decisión difícil para ambos emprender una vida juntos, pues ambos no contaban con los suficientes recursos para obtener lo que deseaban al instante. El hombre se llamaba Antonio, la mujer Yessica. Ambos estaban decididos a comprar una vieja casa que a los 2 les había gustado, pero no por el estado en el que estaba, sino por su diseño.
Al verla pensaron que sería fácil reconstruirla, gozar de una casa buena y expandir su familia de generación en generación tomando su nuevo hogar como el núcleo. Antonio empezó a trabajar fuertemente para conseguir los utensilios del hogar. Cocina, nevera, camas, otros accesorios y ya estaba empezando a reunir para un auto.
Pero aún no conseguía lo que quería, iba por más. Afortunadamente para él le ha salido una oportunidad de trabajo donde en total, pasaría fuera 18 horas de su casa. Esto le obligó a residenciarse a las afueras de la ciudad en donde estaba trabajando. Antonio era ingeniero agroindustria y debía estar pendiente de los cultivos y su mantenimiento durante estas horas al día, al menos en el período de la cosecha.
Los ganaderos le estaban pagando bien, así que no había queja al respecto, pero en el lugar donde estaba no tenía señal, así que su mujer estaba completamente incomunicada con él. Pero una noche, mientras ella dormía, sonó el teléfono local de la vivienda. Ella desesperada corrió a contestar con ansias de que fuera su marido.
¡Qué sorpresa! Si es él, la esposa se muestra emocionada al oír la voz de su marido en el teléfono después de varias semanas sin mantener comunicación con él.
Alexandra: ¡Mi amor! ¿Cómo estás? Te has olvidado de mi ¿Verdad?
Antonio: Hola mi amor, hace mucho calor aquí… Necesito que me hagas un favor.
Alexandra: Te escucho extraño, pero debe ser que estás cansado ¡Claro amor! ¿Dime que necesitas?
Antonio: Hace mucho frío aquí. Necesito que todas las paredes de la casa las lijes. Hay que renovar la casa, las cosas van a cambiar.
Alexandra: Mi amor ¿Seguro que puedo yo con eso? Parece una tarea para hombres.
Antonio: Hazlo, por favor. Seguiré llamándote pronto.
Cuelga…
Alexandra se le ha parecido extraño este comportamiento de Antonio, pero se fue contenta a la cama por saber que está bien. Además está ansiosa de pelar todas las paredes de la casa para comenzar a pintarle, de conocer como es su esposo seguro que le dará una sorpresa por haber hecho semejante hazaña en la casa,
Al siguiente día Alexandra se pone en la tarea que Antonio le había dicho por teléfono. Qué gran sorpresa se ha llevado al pelar por completo la primera pared. Varias fechas estaban imprentas en pared, pero la mujer empezó a darse cuenta de que algo no estaba bien, pues las fechas parecían estar imprentas en sangre. Se notaba claramente que no era sangre de cortadas simples, parecía que habían agarrado una brocha de tamaño medio para plasmar las fechas en la pared con claridad.
Enseguida la mujer toma su móvil y llama al número al que su esposo le llamó la noche anterior. Pero al repicar se llevó una sorpresa, pues la operadora le arrojó un mensaje de que el número al cual estaba llamando no se encontraba asignado a ningún dispositivo. Decidió llamar al número de su esposo pero la operadora le confirmaba que no se encontraba con señal disponible.
Sin mucho que hacer la mujer decidió esperar la próxima llamada de su marido. Mientras se puso en tarea de pelar el resto de paredes. Al llegar la noche había pelado ya unos cuartos. Parece que lo hacía con facilidad y en un par de días podía terminar. Pero lo que le perturbaba era que fechas como 2 de noviembre de 1994, 6 de diciembre del 1948, 4 de febrero de 1967, entre otras fechas aleatorias seguían apareciendo medida que pelaba paredes.
Pasó varias horas de la madrugada en vela pensando en las impresiones de la pared. En ese instante suena el teléfono y ella corre a agarrarlo.
Antonio: Hola mi amor ¿Cómo vas?
Alexandra: Ya casi termino amor, pero estaba ansiosa que llamaras, hay varias fechas imprentas con sangre en la pared.
Antonio: …
Cuelga
A Alexandra se le hizo muy extraño, quizás pensó de que la llamada se le estaba cayendo. Así que fue a dormir tranquila pensando en que su marido volvería pronto. Al siguiente día ya casi terminaba de pelar todas las paredes tras horas arduas de trabajo. Pero en la sala principal se dio cuenta de algo que le perturbo demasiado. Una fecha muy reciente, 1 de Enero de 2017.
En ese momento se asusta y escucha su teléfono sonar. Enseguida lo contesta con mucha prisa:
Antonio: ¡Amor! Qué alegría ya voy en camino a casa ¡Te extraño demasiado!
Alexandra: ¡Antonio! Amor, te tengo que decir algo, ya no aguanto más, y no estoy cansada de pelar estas paredes, simplemente me arte de ver fechas llenas de sangre en la pared ¡Estoy asustada!
Antonio: Amor ¿De qué hablas? Bueno, sea lo que sea quiero decirte que sólo me separan unos cuantos kilómetros de casa, extrañaba hablar contigo.
Alexandra: Pero, si hablamos anoche amor ¿no recuerdas?
Antonio: Amor, yo no te llamo desde que te confirme que casi llegaba y perdí la señal.
Alexandra: No puede ser ¿Me estás jugando una broma? Si es así te voy a matar cuando apenas lleg……
Llamada caída.
Antonio emprende un viaje a toda velocidad, está asustado por los sucesos extraños que ocurren en su casa mientras no estaba. Trágica noticia al llegar a su casa y ver todas las paredes peladas con un montón de fechas imprentas en sangre. Entro a su casa y vio a su esposa desplomada en el suelo, sin la piel de sus piernas y otras partes de su cuerpo.
El hombre no aguanta romper en llanto. Llama a la policía y el equipo forense se queda sorprendido al ver esta ruin escena. No hizo falta interrogar al hombre para darse cuenta de que el no tenía nada que ver con ello. El suceso sólo llevaba horas de haber sucedido, aunque si sometió al hombre a responder preguntas que no tenían nada que ver con la muerte de su esposa.
Equipo forense: Señor ¿Sabe usted de casualidad porque su esposa estaba pelando paredes? Cerca de ella hay una paleta que tiene sus huellas.
Antonio: Ni idea, sólo me dijo que estaba cansada de hacerlo, además dijo que yo le había llamado antes, cuando no fue así.
Equipo forense: Señor Antonio, seguiremos investigando este caso, lo cierto es que adquirieron la casa de un homicida. Su mujer no estaba pelando pintura, sino piel muerta impregnada por un asesino para cubrir las fechas en sangre. Lo más espeluznante es que las fechas coinciden con varios asesinatos y desapariciones.
La fecha impregnada con 1 de enero de 2017 no fue un homicidio, fue un suicidio, el asesino se quitó la vida al recibir año nuevo en este mismo lugar. Su cuerpo no pudo ser recuperado, ya que mientras se ahorcaba se prendió fuego el mismo.
¡Sé el primero en comentar!